La peritonitis se define como la inflamación peritoneal causada por microorganismos, con presencia de un líquido peritoneal turbio, un recuento de más de 100 leucocitos por microlitro, y siendo estos más del 50% de polimorfonucleares. Continúa siendo la complicación más importante derivada de la propia técnica dialítica. Generalmente está causada por bacterias Gram-positivas de la piel como Staphylococcus epidermidis y Staphylococcus aureus, o por enterobacterias y hongos. El peritoneo intacto y los mecanismos de defensa del mesotelio son probablemente las barreras más importantes para evitar el desarrollo de la peritonitis. La prevención es el arma fundamental, y se debe actuar sobre las vías de entrada de los microorganismos a la cavidad peritoneal: acceso peritoneal, sistemas de conexión, soluciones de diálisis y exploraciones facilitadoras de la infección.
Paracoccus yeei es una bacteria no fermentadora medioambiental, presente en el suelo, y en el caso que remitimos, la causante del episodio de peritonitis.
Se trata de una mujer de 46 años diagnosticada de poliquistosis renal del adulto, en programa de diálisis peritoneal automatizada desde hace 3 años, y sin episodios de peritonitis previos. La paciente convive con una perrita que saca a pasear habitualmente.
Acude a la unidad de diálisis porque objetiva líquido turbio en el drenaje del efluente peritoneal. No había tenido fiebre ni náuseas, y el hábito intestinal era normal. Presentaba ligera molestia abdominal, y a la exploración signos de irritación peritoneal. Se realizó recuento del líquido peritoneal obteniéndose 790 leucocitos/mcl, con el 75% de polimorfonucleados, se enviaron muestras para realización de Gram, y cultivos en medios de hemocultivos y convencionales. Ante la confirmación del diagnóstico de peritonitis, se inició tratamiento, según el protocolo de nuestro centro, con vancomicina y ceftazidima intraperitoneal. El tratamiento empírico de peritonitis se hará con la combinación antibiótica de amplio espectro contra Gram-positivos y Gram-negativos. La paciente continuó en régimen ambulatorio, ya que el estado general era bueno, administrándose ceftazidima intraperitoneal diariamente y acudiendo al hospital, para la realización de recuentos celulares de seguimiento. A las 48 h se recibió cultivo positivo, en medio de hemocultivos, para Paracoccus yeei, no se vieron bacterias en el Gram, y el cultivo convencional fue negativo. La peritonitis produce morbimortalidad, y es causa de hospitalización en los pacientes más afectados aunque, generalmente, se puede tratar ambulatoriamente como en nuestro caso.
Paracoccus yeei antiguamente se clasificaba como una cepa del eugonic oxidizer group 2 (EO-2). En 2003 las nuevas técnicas moleculares permitieron identificar esta nueva especie. Son pequeños cocobacilos Gram-negativos aeróbicos, no fermentadores, con morfología de O. La bacteria es catalasa y oxidasa positiva. La identificación fenotípica se realiza por PCR, y se confirma con la secuenciación del gen 16S rRNA. Se identificó, por primera vez, en el líquido peritoneal, en un paciente de diálisis peritoneal de Pensilvania1 y, posteriormente, se ha identificado de forma anecdótica en otros casos2. Afecta, principalmente, a inmunodeprimidos y puede causar infecciones cutáneas3, miocarditis4, artritis5, queratitis y rechazo de injerto corneal6,7.
Se encuentra naturalmente en el suelo. Dado que nuestra paciente tiene una perrita, pensamos que esta pudo llevar a su casa la bacteria, la paciente contaminarse al contactar con ella y al no realizar una estricta higiene de las manos y pasar a peritoneo durante la conexión.
La bacteria Paracoccus yeei es sensible a los betalactámicos, especialmente aminopenicilinas y carbapenems, también a cefalosporinas de tercera generación. La administración intraperitoneal de los antibióticos permite conseguir una mejoría, con mayor concentración en el lugar infectado, lleva a la erradicación de la bacteria fácilmente.
La evolución de la peritonitis fue buena, con descenso progresivo de los leucocitos en el efluente, desde que se recibió el cultivo, se suspendió la vancomicina y se completó tratamiento con ceftazidima durante 14 días.
Esta bacteria, es raramente, identificada en muestras clínicas, los animales como el caballo8 o en nuestro caso, el perro, pueden ser el vehículo para la contaminación humana.
Creemos que este es el primer caso, comunicado, de peritonitis por Paracoccus yeei en España.