Los pacientes con diabetes mellitus tipo 2 (DM2) tienen un riesgo incrementado de desarrollar enfermedad renal crónica (ERC). La ERC se define tanto por el descenso del filtrado glomerular, como por la presencia de albuminuria. Aunque se recomienda la determinación del cociente albúmina-creatinina en orina desde el momento del diagnóstico de la DM 2 y posteriormente al menos una vez al año, en la práctica clínica dicha determinación se encuentra infrautilizada en muchos pacientes. En la etiopatogenia de la enfermedad renal diabética intervienen factores hemodinámicos, metabólicos, proinflamatorios y profibróticos. Asimismo, en el síndrome cardio-reno-metabólico, la adiposidad excesiva o disfuncional juega un papel fundamental, promoviendo el desarrollo de enfermedad renal, diabetes tipo 2 y enfermedad cardiovascular. Por ello, en su tratamiento es necesaria una estrategia multifactorial que incluya el uso de fármacos inhibidores del sistema renina- angiotensina-aldosterona (factores hemodinámicos), inhibidores de SGLT2 (factores hemodinámicos y metabólicos), finerenona (efectos antiinflamatorios y antifibróticos) y los agonistas del receptor de GLP1 con beneficio renal demostrado (factores metabólicos) con el objetivo de reducir con mayor eficacia la progresión de la ERC y disminuir el riesgo de presentar complicaciones cardiovasculares. En este artículo de revisión proponemos estrategias para facilitar la adecuada evaluación e implementación del tratamiento recomendado por las guías de práctica clínica en el paciente con diabetes y albuminuria, presentando un decálogo para mejorar el manejo integral y colaborativo de estos pacientes.
Patients with type 2 diabetes mellitus (T2DM) have an increased risk of developing chronic kidney disease (CKD). CKD is defined by both a decline in glomerular filtration rate and the presence of albuminuria. Although the measurement of the urine albumin-to-creatinine ratio is recommended from the time of T2DM diagnosis and subsequently at least once a year, in clinical practice, this assessment is underutilized in many patients. The pathophysiology of diabetic kidney disease involves hemodynamic, metabolic, pro-inflammatory, and pro-fibrotic factors. Likewise, in cardio-reno-metabolic syndrome, excessive or dysfunctional adiposity plays a fundamental role, promoting the development of kidney disease, type 2 diabetes and cardiovascular disease. Therefore, its management requires a multifactorial approach that includes the use of renin-angiotensin-aldosterone system inhibitors (targeting hemodynamic factors), SGLT2 inhibitors (targeting both hemodynamic and metabolic factors), finerenone (with anti-inflammatory and anti-fibrotic effects), and GLP-1 receptor agonists with demonstrated renal benefits (targeting metabolic factors), with the aim of more effectively slowing CKD progression and reducing the risk of cardiovascular complications. In this review article, we propose strategies to facilitate the proper assessment and implementation of guideline-recommended treatment in patients with diabetes and albuminuria, presenting a ten-point framework to improve the comprehensive and collaborative management of these patients.