NEFROLOGÍA. Vol. XXIII. Número 1. 2003 CARTAS La prevalencia de la insuficiencia renal crónica en Galicia F. Otero-Raviña Jefe de Sección de Coordinación Asistencial. Servicio Gallego de Salud. Santiago de Compostela. Sr. Director: La insuficiencia renal crónica (IRC) es, por sus propias características, una de las patologías más susceptibles de utilizar registros de recogida, análisis y tratamiento de datos. En este contexto, en el año 1995 se creó el Registro de Enfermos Renales de Galicia1, el cual publicó los informes correspondientes a los años 19972, 1998 y 19993. Teniendo en cuenta los datos en ellos aportados, así como los que, correspondientes al año 1996, publicó en su día la Sociedad Española de Nefrología4, se evidencia que la IRC experimentó en nuestra Comunidad Autónoma una evolución semejante y equiparable a la media estatal4-7 en el curso de los últimos años del siglo XX. Con una población próxima a los 2.750.000 habitantes, con dos hospitales trasplantadores y un total de 22 centros de diálisis, la incidencia de esta enfermedad se fue incrementando anualmente, pasando de los 113 casos por millón de habitantes (pmp) en 1996 hasta los 148 de 1999, lo que en números absolutos representa unos 400 enfermos nuevos cada año, de los que el 22% inician diálisis peritoneal (DP) y el resto hemodiálisis (HD). Asimismo, la prevalencia aumentó progresivamente desde los 603 pmp de 1996 hasta los 781 en 1999. Este último dato implica que a 31.12.99 había 2.169 gallegos sometidos a tratamiento sustitutivo renal, de los que 1.109 estaban trasplantados, 843 en HD y 217 en DP. Por su parte, la letalidad en los años referidos también fue semejante a la del conjunto de España, situándose en torno al 10% global, con un 2% para los trasplantados y un 15-20% para los dializados. Con estos antecedentes, no debe resultar difícil entender la sorpresa que, tras leer con atención el inteCorrespondencia: Dr. Fernando Otero-Raviña Sección de Coordinación Asistencial Servicio Gallego de Salud Edif. Admvo. San Lázaro 15771 Santiago de Compostela resante trabajo de Amenábar y cols.8 publicado en el nº 5/2001 de Nefrología, me ha causado observar, en la tabla III, que la prevalencia en Galicia a 31.12.00 se situaba en 2.089 enfermos, exactamente 80 menos que el año anterior. Como en la tabla I se indica que iniciaron tratamiento de diálisis 366 nuevos enfermos, para que los datos de prevalencia fueran correctos tendría que estar la letalidad por encima del 16% global, aproximarse al 10% en los trasplantados e incluso superar el 55% en lo que a DP se refiere. Evidentemente, parecen porcentajes difíciles de asumir, por lo que haciendo un simple ejercicio de considerar la prevalencia de 1999, sumar la incidencia de 2000 y restar el porcentaje de letalidad media estatal (15% en diálisis y 2% en trasplante), teniendo además en cuenta que 134 pacientes abandonaron la diálisis para ser trasplantados, se obtendría una prevalencia de 1.099 enfermos dializados y 1.218 trasplantados, siendo un total de 2.317, lo que representa una tasa de 851 pmp, que evidentemente parece más concordante, no sólo con la media española, sino también con la evolución seguida en Galicia durante los últimos años. Aunque estas diferencias quizá no repercutan a la hora de interpretar los resultados a nivel nacional, sí pueden ser sugerentes de alguna deficiencia en la metodología; por ello, con esta carta pretendo, no sólo exponer el error detectado, sino también advertir de la necesidad de una exhaustiva validación de los datos recabados de tan distintas y distantes fuentes, asegurando la fiabilidad de las mismas. En este sentido, se pone una vez más de manifiesto la necesidad de contar con Registros Autonómicos que, bien coordinados, puedan constituir un buen Registro estatal9,10, pero para ello no basta con la creación de los mismos, sino que se precisa su plena consolidación, para que, desde el imprescindible dinamismo puedan ser de utilidad en lo que se refiere a la realización de estudios clínicos y epidemiológicos, la evaluación de necesidades, la planificación de recursos y la valoración de la asistencia nefrológica en la comunidad. 89 F. OTERO-RAVIÑA y cols. BIBLIOGRAFÍA 6. 1. Se crea el Registro de Enfermos Renales de Galicia. Orden de la Consellería de Sanidad y Servicios Sociales de 7 febrero de 1995. Diario Oficial de Galicia de 8 de marzo de 1995. 2. Otero-Raviña F: Rexistro de Enfermos Renais de Galicia. Informe 1997. Xunta de Galicia. Santiago 1998. 3. Oficina de Coordinación de Trasplantes de Galicia: Rexistro de Enfermos Renais de Galicia. Informe 1998-99. Xunta de Galicia. Santiago 2001. 4. Comité de Registro de la SEN y Registros Regionales: Informe de diálisis y trasplante de la Sociedad Española de Nefrología correspondiente al año 1996. 4. http://www. senefro.org/registro.htm 5. Comité de Registro de la SEN y Registros Autonómicos: Informe de diálisis y trasplante de la Sociedad Española de Ne- 7. 8. 9. 10. frología correspondiente al año 1997. Nefrología 19: 203209, 1999. Comité de Registro de la SEN y Registros Regionales: Informe de diálisis y trasplante de la Sociedad Española de Nefrología correspondiente al año 1998. Nefrología 20 (Supl. 6): 34-42, 2000. Comité de Registro de la SEN y Registros Autonómicos: Informe de diálisis y trasplante de la Sociedad Española de Nefrología y Registros Autonómicos correspondiente al año 1999. Nefrología 21: 246-252, 2001. Amenábar JJ, García López F, Robles NR, Saracho R, Pinilla J, Gentil MA y cols.: Informe de diálisis y trasplante de la Sociedad Española de Nefrología y Registros Autonómicos, año 2000. Nefrología 22: 310-317, 2002. Amenábar JJ: Registros de diálisis y trasplante, una asignatura pendiente en España. Nefrología 19: 200-202, 1999. Amenábar JJ: Registros sanitarios, una necesidad actual. Nefrología 22: 104-105, 2002. N O T I C I A S 90 E F R O L O G Í A NUEVO CD-ROM DE NEFROLOGÍA Con el patrocinio de ROCHE, la revista NEFROLOGÍA se edita de nuevo en formato CD-ROM. Toda la producción de los años 1999 a 2002 inclusive. Búsqueda rápida por autores, palabras clave, temas e índice cronológico. Artículos en formato PDF, de fácil impresión en papel. 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