Sr. Director:
La enfermedad de Grover es una dermatosis caracterizada por exantema máculo-papular, eritematoso y pruriginoso, principalmente troncular. La enfermedad renal crónica bajo diálisis es una condición predisponente, por mecanismos no totalmente dilucidados. Comunicamos el caso de un varón de 68 años con poliquistosis renal, en diálisis peritoneal continua ambulatoria desde hace seis meses; hiperplasia prostática benigna condicionando múltiples infecciones urinarias de repetición, recibiendo tratamiento profiláctico con contrimetroprim-sulfametoxazol (TMP-SMX). Consulta por fiebre de 38 ºC, malestar general, astenia y, 48 horas antes, lesiones máculo-papulares, pruriginosas y eritematosas en el tronco y posteriormente en los miembros. A la exploración física, el paciente se halla afebril, con máculo-pápulas eritematosas en el tronco y los miembros (figura 1). La exploración física restante no presenta hallazgos relevantes. Las exploraciones complementarias evidencian bicitopenia, sin otros hallazgos contributorios. Se realiza biopsia cutánea (figura 2) que revela acantolisis suprabasal con presencia de células disqueratóticas en los estratos superficiales en forma de granos y cuerpos redondos, y leve infiltrado inflamatorio dérmico perivascular en dermis superficial, hallazgos compatibles con enfermedad de Grover. Se sustituye el uso de icodextrina por soluciones a base de dextrosa y suspensión de sulfamidas, con remisión de las lesiones cutáneas y la bicitopenia. Inicialmente planteado como posible agente etológico el TMP-SMX, se reintroduce la solución de diálisis con icodextrina, recidivando en una semana el exantema cutáneo, con mejoría con tratamiento corticoideo tópico y suspensión de la icodextrina.
La dermatosis acantolítica transitoria y persistente (TAD) inicialmente fue descrita por Ralph Grover como una erupción transitoria pápulo-vesicular, que comprometía el tronco y los muslos1. Generalmente, es autolimitada2. Afecta principalmente a adultos caucásicos, a partir de la quinta década de la vida, en una proporción de 1,6 a 2,1 masculino/femenino3. Su etología es desconocida y ha sido asociada con sobreexposición solar, calor, fiebre, sudoración, estados de inmunodeficiencia, neoplasias y otras dermatosis1. Algunos casos se han asociado con fármacos, entre estos, la pirimetamina-sulfadoxina4. La enfermedad renal crónica bajo diálisis es una condición asociada recientemente identificada. Hasta el momento, la TAD ha sido comunicada en siete casos de pacientes bajo hemodiálisis y solo dos en diálisis peritoneal2. En dichos casos, las lesiones eran persistentes, salvo cuatro pacientes, donde se practicó trasplante renal. En la mayoría de los casos de enfermedad de Grover se afecta principalmente el tronco. La erupción es papular eritematosa e intensamente pruriginosa. Histopatológicamente, el denominador común es la acantolisis, definida como la disociación de los queratinocitos de la epidermis4. El diagnóstico diferencial se hace con genodermatosis, pénfigo y la enfermedad de Galli-Galli. Corticoesteroides tópicos, antihistamínicos, humectantes y emolientes representan los agentes terapéuticos de primera línea. En los casos persistentes o recidivantes se recomiendan: corticoides sistémicos, análogos de la vitamina D tópicos, retinoides sistémicos, fototerapia y PUVA (fotoquimioterapia con psoraleno y rayos ultravioleta A).
El presente caso había sido orientado inicialmente como una TAD secundaria a sulfas. Sin embargo, no deja de llamar la atención la exacerbación y posterior remisión de la sintomatología con la reintroducción y luego suspensión de las soluciones de diálisis a base de icodextrina. El uso de la icodextrina en los líquidos de diálisis peritoneal se ha asociado con la aparición de dermatitis exfoliante, dermatitis atópica y otros exantemas tipo rash generalizado5. La TAD debe ser considerada entre el diagnóstico diferencial de las dermopatías en pacientes con enfermedad renal crónica que reciben terapia sustitutiva.
Conflictos de interés
Los autores declaran que no tienen conflictos de interés potenciales relacionados con los contenidos de este artículo.
Figura 1. Máculo-pápulas eritematosas en tronco
Figura 2. Biopsia cutánea compatible con enfermedad de Grover