La enfermedad renal diabética (ERD) continúa siendo una de las primeras causas de muerte y de necesidad de diálisis en la población mundial. A pesar de ello, los procedimientos de diagnóstico son poco específicos y en ocasiones obsoletos, y no representan el global de la población diabética y sus particularidades. En los últimos años ha surgido la necesidad de hallar nuevos marcadores más específicos y sensibles para diagnosticar y predecir la evolución de la ERD, inicialmente con el uso de biomarcadores simples y posteriormente mediante paneles de biomarcadores o determinación genética. El desarrollo de la biología de sistemas, con análisis de marcadores proteómicos y metabolómicos en orina, ha sido crucial para el desarrollo de ensayos clínicos. Recientemente, el primer ensayo clínico europeo realizado con un marcador pro-teómico ha demostrado la asociación entre el clasificador de proteómica urinaria CKD273 y el incremento en la progre-sión a microalbuminuria, lo que abre la puerta a la incorporación de la biología de sistemas a la nueva definición de la enfermedad renal crónica en el diagnóstico precoz y tratamiento dirigido de la enfermedad renal.