Mujer de 45 años con insuficiencia renal crónica secundaria a nefropatía diabética. Inició hemodiálisis en 2007 a través de un catéter permanente yugular derecho. Tres meses después se le realizó una fístula arteriovenosa, pero debido a su lenta maduración persistía la utilización del catéter permanente para la diálisis.
La paciente consulta por síndrome febril sin otro foco infeccioso que el catéter. Se inició antibioterapia y se procedió a la retirada del catéter, remitiendo la fiebre en veinticuatro horas. Una semana más tarde reaparece el cuadro febril. Se le realizó un ecocardiograma transesofágico para descartar una endocarditis, evidenciándose la presencia de un trombo en el trayecto de la vena cava superior que se introducía un centímetro en la aurícula derecha. Ante estos hallazgos se inició anticoagulación y antibioterapia sistémica, pero cinco días más tarde la paciente persistía con fiebre y clínica bacteriémica, por lo que se decide la extracción quirúrgica del trombo. La intervención implicó circulación extracorpórea, apertura de la aurícula derecha y venotomía de la vena cava superior, con extracción del trombo. Tras la cirugía la paciente ha permanecido estable clínicamente sin nuevos episodios febriles.
Figura 1. Estudio transesofagico